Recogida de la miel

Aunque es obvio, conviene señalar que las características de la miel dependen fundamentalmente del néctar que han libado las abejas siendo en consecuencia numerosas las variedades (brezo, mil flores, tomillo, encina y, acacia entre otras).

El néctar recogido de las flores lo guardan en el buche para poder trasportarlo a la colmena. En el buche empiezan a trasformar el néctar en miel. Una vez en la colmena lo guardan en las celdas de los panales y ésto será su alimento. En invierno se alimentarán de la miel producida en primavera- verano y que lo han almacenado Parte de esta miel es lo que recoge el apicultor

Para extraer la miel de los panales y una vez en el local destinado a esta finalidad el apicultor utilizando una espátula caliente procede a retirar la capa de “cera virgen” que recubre los panales y que es la que utilizan el matrimonio Elorza / Ceberio para prepara cremas y aceitas a las que anteriormente nos hemos referido. Se continúa introduciendo los panales en una centrifugadora donde por rotación la miel se desprende de las celdillas en que se encontraba.

A continuación la miel pasa a una cuba de acero inoxidable provista de filtro para su depuración. Tras dejarlo reposar 15 / 20 días se procede a su envasado.

Una parte de la miel obtenida en Euskal Herria es considerada como ecológica lo que requiere otros cuidados como que las colmenas se encuentren ubicadas en lugares en que a tres kilómetros a la redonda no existan contaminantes como zonas de cultivo que se traten con productos químicos entre otros.

Las abejasLas abejas. (Fotografía: Javier Carballo).