Un modelo de gobernanza colaborativa para Gipuzkoa

Una de las características fundamentales de las sociedades modernas es la creciente complejidad e incertidumbre que nos rodean. Las dudas sobre el proceso de construcción europea se han multiplicado tras la crisis de los refugiados, la victoria del Brexit en el referéndum del Reino Unido y la sucesión de atentados terroristas de inspiración yihadista. El crecimiento económico global se ve seriamente cuestionado por los síntomas de agotamiento del modelo de crecimiento de China, la crisis institucional de Brasil o la inestabilidad económica de los países productores de energía y materias primas ante la persistencia de un escenario de precios bajos. Los cambios geopolíticos dificultan una acción concertada para resolver los grandes retos de nuestro planeta y solucionar conflictos regionales cada vez más enquistados.
La revolución digital está transformando radicalmente nuestras vidas y sectores enteros de actividad económica, como la industria, las finanzas, el turismo o los medios de comunicación. Empresas que venían dominando tecnologías y mercados se ven superadas en poco tiempo por nuevos jugadores que apuestan por modelos de negocio innovadores y disruptivos.
El miedo ante la incertidumbre y el desencanto social están alterando decisivamente el escenario político de las sociedades occidentales. Y se multiplican las demandas de una mayor transparencia, rendición de cuentas y participación ciudadana en el ámbito público.
Todas estas transformaciones no sólo plantean retos estratégicos sino que también ofrecen inmejorables oportunidades a un territorio como Gipuzkoa. Destacados expertos, como Daron Acemoglu y James Robinson, vienen señalando el impacto decisivo del modelo de gobernanza en el progreso económico y social de los países. El funcionamiento de las instituciones políticas y económicas, así como la relación entre los diferentes actores públicos, empresariales y del tercer sector, explican en gran medida por qué unos territorios disfrutan de mayores niveles de riqueza y bienestar que otros.
En Gipuzkoa contamos con una sociedad muy dinámica que ha promovido experiencias de éxito contrastado en el ámbito empresarial, tecnológico, científico, social, cultural y educativo. El dinamismo social viene siendo la base de la prosperidad económica y la cohesión del territorio. Aprovechando este activo fundamental, la Diputación Foral de Gipuzkoa y las demás instituciones públicas del territorio han de intensificar la unión de esfuerzos con las empresas y organizaciones sociales para resolver retos estratégicos, como la adaptación de nuestra industria a la revolución digital, la creación de empleo o el envejecimiento demográfico.
Esta unión de esfuerzos requiere establecer un nuevo modelo de gobernanza colaborativa. En este nuevo modelo la Diputación de Gipuzkoa asume un liderazgo facilitador, que fortalece los diferentes proyectos e iniciativas empresariales y sociales. La gobernanza colaborativa se basa en una visión compartida sobre el futuro de Gipuzkoa y las acciones para hacerla realidad.
En el diseño de este nuevo modelo de gobernanza, Gipuzkoa se está inspirando en experiencias internacionales avanzadas, como las de Escandinavia y Canadá. En estas sociedades existe una dinámica de colaboración a largo plazo entre las instituciones públicas, las empresas y el tercer sector, que no se ve interrumpida por cambios políticos o procesos electorales. También está plenamente aceptado que la gobernanza es una responsabilidad compartida por el conjunto de los actores del territorio.
La gobernanza colaborativa ha permitido a ciudades escandinavas como Odense transformarse en centros de manufactura avanzada con la mayor calidad de vida en Europa. Asimismo, el modelo de gobernanza colaborativa ha sido clave para transformar a Toronto en la mejor ciudad para vivir en el mundo, según la revista 'The Economist'. Esta transformación ha sido liderada conjuntamente por las instituciones públicas y una amplia red de líderes cívicos. Frente a la pasividad de la sociedad en otros territorios, los referentes escandinavos y canadienses promueven activamente el liderazgo y la participación ciudadanas.
Los próximos 1 y 2 de septiembre tendremos la oportunidad de conocer de primera mano algunas de estas experiencias internacionales, en un curso de verano sobre gobernanza abierta y colaborativa, organizado conjuntamente por la Universidad del País Vasco y la Diputación Foral de Gipuzkoa.
A lo largo de esta legislatura, la Diputación de Gipuzkoa está impulsando con los actores del territorio y expertos internacionales un modelo de gobernanza colaborativa basado en sus fortalezas y en la adaptación de las mejores prácticas globales. Con este fin, se ha puesto en marcha el programa 'Etorkizuna Eraikiz', en el que están ya participando los principales actores del territorio. A través de este programa, se persigue poner en marcha nuevos y ambiciosos proyectos económicos, sociales y culturales que permitan modernizar Gipuzkoa y que cimenten el futuro económico, social y político del territorio. Estos proyectos estratégicos se diseñarán y ejecutarán en colaboración con la sociedad y las diversas organizaciones y entidades de Gipuzkoa. A lo largo de su historia, Gipuzkoa se ha caracterizado por su apertura global a las ideas más avanzadas y por su acción colectiva. Los valores de las guipuzcoanas y guipuzcoanos siempre han estado próximos a los de las sociedades más dinámicas y participativas del norte de Europa.
La sociedad guipuzcoana ha preferido ser protagonista y no espectadora de las principales transformaciones del territorio. En estos tiempos de cambio e incertidumbre, la gobernanza colaborativa es nuestra garantía de futuro.