Atrás Sesión de formación "Transformar la perspectiva de género en la cultura"

Sesión de formación "Transformar la perspectiva de género en la cultura"

La pareja formada por Jemima Cano y Rebeka Elizegi acompañó la primera de las sesiones de formación del año. Con el fin de transformar la perspectiva de género en la cultura, se analizaron el marco teórico y legal actual para reflexionar sobre la producción cultural y sus indicadores

Sesión de formación "Transformar la perspectiva de género en la cultura"

En esta ocasión, hemos probado una nueva fórmula. Para la primera sesión formativa de K bulegoa en el año 2022, hemos invitado a dos profesionales. La trayectoria profesional de Jemima Cano ha estado centrada en la gestión cultural y la producción de danza, mientras que la de Rebeka Elizegi ha estado basada en la creación artística. Ambas se dedican en su día a día a cuidar la perspectiva de género en el desarrollo de proyectos y a fomentar las labores de sensibilización.

De esa manera, Jemima Cano y Rebeka Elizegi han sido las guías y compañeras de viaje de la sesión, han creado y cuidado los contenidos específicamente para esta experiencia de aprendizaje colectiva. Ambas se embarcaron con entusiasmo en este reto: cómo unir teoría y prácticas desde una perspectiva de género integral. La cita era en el convento de Santa Teresa de la Parte Vieja de San Sebastián.

Desde el principio, las veinte personas asistentes nos sentamos en círculo celebrando el encuentro con la sonrisa al descubierto. Hicimos una ronda para conocernos o reconocernos. Después, para dar la bienvenida también al cuerpo, nos desplazamos y nos sumergimos en una actividad de collage propuesta por Rebeca. Disponíamos de las herramientas sobre la mesa: tijeras, pegamento y fotos de mujeres de artistas de la historia. Fue un juego de visibilización de las mujeres artistas y una invitación a la complicidad de las participantes. Y es que es importante que a medida que vamos haciendo, prestemos atención a los trabajos y continuemos haciendo aportaciones al cuidado de la perspectiva de género, desde la cocreación. La propuesta de collage combinó el trabajo individual con el trabajo en equipo, una forma de abordar el tema que nos iba a hacer reflexionar tanto física como artísticamente. El resultado fue esta imagen conjunta, una mirada compartida.


Posteriormente, nos mostraron diferentes intersecciones actuales, con referencias valiosas. Rebeka nos mostró varios de sus emocionantes proyectos. En todos ellos destaca la persistencia de condiciones que no nos ayudan a trabajar desde una perspectiva de género más adecuada –condiciones propias del sector, personales y de género–. Frente a esos condicionantes, muchos de sus trabajos se centran en visibilizar los trabajos de las mujeres, fomentar las colaboraciones y activar las reflexiones al respecto.

Jemima compartió información sobre el contexto jurídico, dando un rápido repaso a las leyes vascas, estatales y europeas. También analizó la creación y los desarrollos culturales, abordando indicadores concretos y válidos (aterrizados y 360 grados) para el cuidado y el desarrollo de la perspectiva de género. El objetivo era crear una hoja de ruta propia, dotada de herramientas basadas en el autodiagnóstico, que beban del conocimiento colectivo y de la comunidad de nuestras sabias mujeres. Para ello buscamos la inspiración, no sólo en las buenas prácticas emanadas de la comunidad, del auzolana y de la sororidad, sino también en nuestras propias experiencias.

Por último, estrechamos el círculo, dejando a un lado la distancia de seguridad para acercarnos a un espacio de cooperación, y diseminamos sendas semillas para avanzar en la perspectiva de género con la esperanza de que los rayos de sol de aquella mañana luminosa las hagan florecer en un futuro cercano.

La presentación recoge las ideas, reflexiones y recursos que se compartieron en la sesión. Además, se creó un ejercicio de autodiagnóstico, como complemento a los materiales presentados durante la jornada.