Diputación refuerza el programa ‘Goxatu’ en las residencias

En diciembre del 2020, en el contexto de la pandemia de la COVID-19, la Diputación Foral de Gipuzkoa creó el programa Goxatu con el fin de proteger al máximo la calidad de vida y bienestar psico-emocional de las personas mayores que viven en las residencias de Gipuzkoa. Este 2021, se ha reforzado el programa para acercar e impulsar las actividades culturales en los centros residenciales, “desde la calidez, la colaboración con agentes sociales y comunitarios, y con el objetivo de contribuir a un ocio activo a través de la música y mejorar el bienestar de las personas mayores”, ha señalado la diputada de Políticas Sociales, Maite Peña.

          “Goxatu no solo mira a las Navidades, sino que tiene vocación de perdurar en el tiempo”. La diputada ha explicado que las medidas activadas en diciembre del 2020, antes de la llegada de las vacunas, se han mantenido durante todo 2021, como el aumento de las ratios de fisioterapia, terapia ocupacional y apoyo psicosocial, el incremento y normalización progresiva de las visitas y salidas, el impulso del apoyo comunitario, y la ampliación de actividades de índole cultural, con más de 90 conciertos musicales y sesiones de bertsolarismo.

En ese sentido, en un momento en el que las visitas y salidas se están desarrollando “con normalidad, pero con máxima prudencia”, desde la Diputación se ha vuelto a reforzar la actividad cultural en las residencias con 28 actuaciones musicales y de danza, “que son complementarias a las actividades habituales que se desarrollan en los centros residenciales en periodo navideño”, ha explicado la diputada.

En comparación a diciembre del 2020, “vivimos una situación mucho más normalizada en las residencias, en gran medida gracias a la vacunación, que supera el 96% entre las personas residentes, pero el virus sigue aquí”, por eso, el refuerzo de las actividades culturales, musicales y relacionales resulta “vital”. “Aunque la Navidad sea una época de calor, cariño y cercanía, el virus sigue presente, con una incidencia en la comunidad preocupante, y que está teniendo reflejo en los centros residenciales”. Por eso, Maite Peña ha recalcado que “no podemos bajar la guardia”, y aboga por seguir equilibrando la balanza entre la seguridad y el bienestar emocional: “Las residencias son espacios conectados con la comunidad, con visitas, entradas y salidas, por eso, es imprescindible que sigamos profundizando en la prevención y trabajando desde la responsabilidad y la prudencia”.