Koldo Mitxelena Kulturunea (KMK) avanza en su transformación: adjudicada la obra de rehabilitación del salón de actos
Koldo Mitxelena Kulturunea (KMK) avanza en su transformación: adjudicada la obra de rehabilitación del salón de actos
Koldo Mitxelena Kulturunea (KMK) avanza en su transformación: adjudicada la obra de rehabilitación del salón de actos
La diputada de Cultura, Goizane Álvarez, subraya que “la reforma parcial del Koldo Mitxelena es el proyecto estratégico de la legislatura en materia de cultura, y en 2026 abrirá sus puertas con un aire renovado, reforzando su vocación de equipamiento público, vivo y accesible para todos y todas”.

Koldo Mitxelena Kulturunea (KMK) da un paso decisivo en su proceso de renovación con la reciente adjudicación de la obra de rehabilitación del Salón de Actos, situado en planta baja, el único espacio cuya intervención quedaba pendiente. Esta sala será objeto de una profunda renovación para mejorar su accesibilidad, equipamiento y funcionalidad, preservando sus usos actuales y el espíritu que la ha convertido en un lugar clave de la vida cultural guipuzcoana.
Así se lo han señalado esta mañana en una visita encabezada por la diputada de Cultura, Goizane Álvarez; el director de Promoción Cultural, Isaac Palencia; Patxi Presa, jefe de servicio de Promoción Cultural y KMK, así como la arquitecta foral Yolanda Zorita y el director de obra, Jovino Martínez. La obra, con un coste aproximado de 10 millones de euros, se estima que estará finalizada para primavera de 2026.
Álvarez ha destacado que “la adjudicación de la obra de la Sala de Actividades marca un punto de inflexión en el proceso de la obra. Este espacio ha sido siempre un símbolo de la participación ciudadana en la vida cultural, y ahora va a transformarse para seguir cumpliendo ese papel, con mejores condiciones y nuevas posibilidades. La reforma parcial del Koldo Mitxelena es el proyecto estratégico de la legislatura en materia de cultura, y a partir de la primavera de 2026 abrirá sus puertas con un aire renovado, reforzando su vocación de equipamiento público, vivo y accesible para todos y todas.”
El emblemático edificio de 7.200 metros cuadrados repartidos en cuatro plantas, cerró sus puertas en junio de 2023 después de casi 30 años de servicio para encarar una reforma parcial de sus instalaciones ya obsoletas, acabar con las filtraciones de agua de la cubierta y actualizar la accesibilidad a la normativa vigente.
La actualización de las instalaciones responde a la necesidad urgente de renovar una infraestructura muy deteriorada, tal como señalaban los informes técnicos elaborados por el servicio de Arquitectura. Sin embargo, esa necesidad “se ha transformado en una oportunidad para repensar el centro cultural y adaptarlo a las transformaciones socioculturales vividas en las últimas décadas: desde la digitalización, hasta la emergencia de nuevas formas de creación, consumo y participación cultural, pero sin perder la esencia de esta instalación, por la que pasan diariamente alrededor de mil personas y que es una de las mejor valoradas del territorio”, ha añadido la diputada.
Así, los trabajos están permitiendo modernizar las infraestructuras, reorganizar los espacios y actualizar la oferta de servicios.
Principales intervenciones
Tras la reforma, el edificio será una instalación más luminosa, accesible, confortable y segura, y ganará en metros cuadrados disponibles para el usuario. Concretamente, 620 metros cuadrados: 109 metros en los dos patios de la planta baja; y 511 metros cuadrados en la segunda planta destinados a investigadores y fondos patrimoniales.
El proyecto contempla:
- Renovación integral de la cubierta, lucernarios e instalaciones para mejorar eficiencia energética y confort.
- Restauración de las fachadas originales de 1912.
- Garantía de accesibilidad universal con la instalación de dos ascensores y mejoras en accesos.
- Nuevos espacios en los patios de planta baja tras el cierre de sus suelos.
- Reconversión del antiguo paraninfo en una sala de lectura (biblioteca) de uso general, no restringido, que recibirá el nombre de Sala Lagun.
- Creación de una nueva área para investigadores en la segunda planta, donde anteriormente se ubicaban parte de las oficinas del departamento de Cultura de la Diputación.
- Mejora de iluminación, acabados interiores y diseño de espacios comunes como el vestíbulo.
La reforma se acompaña de una reorganización de usos por plantas, siguiendo una “escala sonora” que optimiza la experiencia de lectura, estudio, investigación y participación. Desde zonas de exposiciones en planta inferior hasta nuevos espacios para juventud, literatura o patrimonio.
Un nuevo KMK al servicio de la ciudadanía
Uno de los hitos del proyecto será la transformación de la antigua Sala del Fondo de Reserva en un nuevo espacio abierto a todos los públicos. Este espacio quiere convertirse en una referencia dentro del edificio, y para ello, trabajará en los ámbitos de la literatura y el conocimiento con propuestas en colaboración con autores y autoras, profesionales y personas expertas que propondrán periódicamente diferentes temas y bibliografías. El espacio rendirá también homenaje a la librería Lagun, que fue un punto de encuentro para el diálogo, la diversidad de ideas y la reflexión.
Además, la programación y los servicios de KMK se renovarán para responder a las nuevas realidades y hábitos culturales.
- Refuerzo de la línea de trabajo en torno a la Palabra, el debate social, la reflexión y el pensamiento crítico.
- Consolidación de programas como Diálogos de cineastas o Mintza Lagun, festivales como Crossover o Lumafest.
- Estudio de hábitos culturales en 2025 para adecuar programas y servicios
- Proyección territorial de KMK más allá de Donostia, con una apuesta clara por el trabajo en red.
- Valorización del patrimonio documental y bibliográfico guipuzcoano.
Así, durante las obras y hasta que el edificio entre de nuevo en funcionamiento, los servicios de KMK continuarán repartidos por distintos emplazamientos: el Convento Santa Teresa, en la Parte Vieja de Donostia, seguirá acogiendo la programación cultural; el servicio de préstamo se ofrece en el espacio de la calle Reyes Católicos, 18; y los 300.000 documentos que forman el fondo, continuarán a buen recaudo en el Archivo Histórico de Oñati.
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