Gipuzkoa promueve el desperdicio alimentario cero en el sector de la hostelería
Gipuzkoa promueve el desperdicio alimentario cero en el sector de la hostelería
Diputación y Basque Culinary Center firman un convenio para reducir el desperdicio alimentario a través del desarrollo del proyecto “Rest-0".
Asensio: “Para hacer frente al reto del desperdicio alimentario, debemos reducir la cantidad de residuo que generamos, promover la reutilización de productos y el reciclaje, con el fin de que no se conviertan en deshecho o basura”.
El diputado de Medio Ambiente, José Ignacio Asensio y el director general de la fundación Basque Culinary Center, Joxe Mari Aizega, han suscrito un convenio para fomentar la colaboración entre los distintos agentes de la cadena de valor alimentaria. Para ello, llevarán a cabo el proyecto “Rest-0, la restauración en Gipuzkoa y su compromiso con el desperdicio cero”, a través del cual se realizarán una serie de acciones para mejorar la sostenibilidad en Gipuzkoa, tomando el sector de la restauración como motor del cambio.
De esta forma se piensa, en primer lugar, identificar y reunir a los diferentes agentes que operan en el sector de la cadena alimentaria. En segundo lugar, se diseñarán dinámicas y actividades para la ideación y organización de una serie de jornadas y, finalmente, se analizarán y extraerán conclusiones de evento con el objetivo final de crear una comunidad de buenas prácticas en torno a la sostenibilidad en Gipuzkoa, que promueva el desperdicio alimentario cero en el sector. Para el desarrollo de estas actividades, el Departamento de Medio Ambiente aportará 10.000 euros.
Esta iniciativa tiene cierta continuidad con los de años anteriores, ya que el Basque Culinary Center lleva años trabajando en el tema del despilfarro alimentario a través del Centro Tecnológico Sectorial en gastronomía, BCC Innovation, y además es un referente pedagógico en la gastronomía del Territorio.
Asensio ha explicado que la prevención del despilfarro alimentario es uno de los ejes estratégicos del Departamento de Medio Ambiente. Se trata de un residuo del que hay que tomar conciencia por sus repercusiones sociales y ambientales y actuar para que las cifras se reduzcan. Según la última caracterización de residuos urbanos realizada en Gipuzkoa en 2016, el despilfarro alimentario corresponde aproximadamente al 2,4% del rechazo generado. “No podemos seguir desperdiciando alimentos que otras personas necesitan y que, además, provocan graves consecuencias por el consumo de recursos y sus emisiones” ha declarado el responsable foral. Las estimaciones realizadas en Gipuzkoa cifran en 123.000 toneladas los alimentos despilfarrados al año en la cadena agroalimentaria del territorio.
La restauración es uno de los motores económicos y laborales locales de mayor repercusión, pero es también un sector con un elevado impacto ambiental, un alto consumo de recursos y una gran generación de residuos. De ahí, que Asensio haya subrayado la necesidad de avanzar hacia una restauración sostenible: “Para hacer frente al reto del desperdicio alimentario, debemos reducir la cantidad de residuo que generamos, promover la reutilización de productos y el reciclaje, con el fin de que no se conviertan en deshecho o basura”.
Los sistemas alimentarios actuales no resultan sostenibles porque se usan recursos cuya tasa de producción es menor que la de consumo, y son responsables del uso del 70% del agua, el 30% de las emisiones de efecto invernadero y de la sobre-explotación de la pesca.
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