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Luz verde al nuevo Decreto Foral-Norma con medidas fiscales para hacer frente a la crisis

Las medidas se han acordado con las Haciendas forales de Araba y Bizkaia, y ponen el foco en ayudar a personas autónomas y pequeñas empresas.

El Consejo de Gobierno de la Diputación Foral de Gipuzkoa ha dado luz verde hoy al Decreto Foral-Norma que recoge nuevas medidas fiscales para ayudar a los sectores más afectados por la crisis del COVID-19. La normativa ha sido elaborada conjuntamente por las Haciendas Forales de Álava, Bizkaia y Gipuzkoa, y ha sido compartida con el Gobierno Vasco. "Son medidas dirigidas especialmente a las personas autónomas y a las pequeñas empresas", ha dicho la portavoz Eider Mendoza. Destacan, sobre todo, cuatro medidas: la exención del pago fraccionado a las personas autónomos, los nuevos incentivos para incentivar las bajadas de los alquileres, un nuevo incentivo ligado a TicketBAI y otra nueva deducción para hacer frente a los gastos relacionados con el COVID-19 y ayudar a la reanudación de la actividad económica.

Mendoza ha comparecido esta mañana ante los medios de comunicación, como cada martes, para dar cuenta de las decisiones que se han tomado y de los temas que se han tratado en el Consejo de Gobierno de esta semana. En dicha comparecencia, ha recordado que hace dos semanas se acordaron una serie de medidas por parte de las Haciendas forales de la Comunidad Autónoma Vasca, y hoy se ha aprobado la normativa que recoge aquellas modificaciones. "Hacer frente a la crisis económica que está provocando la pandemia COVID-19 está entre nuestras prioridades y, en este contexto, estamos incidiendo con todos nuestros recursos y competencias disponibles. Lo que hemos aprobado hoy, es una muestra más del esfuerzo que estamos haciendo en materia de fiscalidad ", ha destacado.

La primera medida se dirige a contribuyentes que realizan actividades económicas. Así, al igual que en todo el año 2020, las personas autónomas estarán exentas de realizar pagos fraccionados durante los dos primeros trimestres del año 2021. La segunda medida pone el acento en los alquileres: se establecen nuevos incentivos en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y en el Impuesto sobre Sociedades para las y los arrendadores que bajan el alquiler a negocios especialmente afectados por la crisis del COVID-19, como la hostelería o el pequeño comercio.

Así, en el caso del IRPF, la cuantía de la rebaja de alquiler se considerará como gasto deducible. No obstante, en el caso de que el arrendamiento constituya un rendimiento del capital para el arrendador, la parte de gasto que no resulte deducible por no tener ingresos suficientes, dará derecho a una deducción en la cuota íntegra del 15%. En caso de que tampoco se cuente con cuota suficiente para poder beneficiarse de la deducción, la misma podrá aplicarse en el IRPF del año siguiente. En el caso del Impuesto sobre Sociedades, los arrendadores también considerarán gasto deducible la cuantía de la rebaja de alquiler a quienes desarrollen actividades económicas que se hayan visto afectadas de forma sustancial con motivo de la COVID-19.

Por otra parte, la aplicación de los incentivos requerirá el cumplimiento de dos requisitos: por un lado, la duración de la rebaja de la cuantía del alquiler debe extenderse durante al menos tres meses a lo largo de 2021; y por el otro, no puede existir ningún tipo de compensación o recuperación de la renta de alquiler en un momento posterior, bien sea mediante incrementos de rentas de alquiler de períodos de tiempo posteriores, otras prestaciones o cualquier otro tipo de contraprestación por parte de la persona arrendataria o de terceras personas.

La tercera medida, adelantada la semana pasada por la propia portavoz, es el nuevo y reforzado incentivo que podrán aplicar las personas contribuyentes que empiecen a funcionar en periodo voluntario en TicketBAI. Se trata de una deducción del 60% con un límite de 5.000 euros y que se aplicará en el IRPF y en el Impuesto de Sociedades. El gasto financiado por la deducción es el realizado para la implantación del sistema TicketBAI (software, ordenadores, cajas registradoras…). "El objetivo es, lógicamente, incentivar que las y los contribuyentes empiecen a utilizar TicketBAI en periodo voluntario", ha dicho Mendoza. El único requisito es que la facturación se realice voluntariamente a través del sistema TicketBAI antes del próximo 1 de noviembre. "Teniendo en cuenta la intensidad de la deducción (60%), probablemente sea uno de los incentivos más potentes que tenemos actualmente en Hacienda. Gracias a TicketBAI, además de avanzar en la digitalización de nuestra economía, vamos a reforzar claramente nuestra lucha contra el fraude fiscal ", ha añadido.

Por su parte, la cuarta medida establece una nueva deducción, también en el IRPF y Sociedades, para favorecer el retorno a la actividad de las actividades económicas especialmente afectadas por el COVID-19. "Aquí también tenemos como objetivo ayudar a personas autónomas y a las pequeñas empresas", ha dicho Mendoza. En este caso, se plantea una deducción del 10% por los gastos realizados a partir del 1 de enero de 2021 y en la que se ayudarán inversiones de hasta 5.000 euros como máximo. "¿Qué tipo de gastos? Gastos realizados para adaptarse a la pandemia COVID-19: inversiones en el control de aforos; medidas para evitar la transmisión del COVID-19, como la compra de mamparas; la renovación de medios para la prestación de servicios, como software de reservas…", ha precisado la portavoz.

Para la aplicación de la deducción, eso sí, se deberá acreditar una reducción significativa de la actividad a consecuencia de la pandemia del COVID-19: el volumen de operaciones del año 2020 deberá ser al menos un 25% inferior al de 2019 y, por otra parte, el resultado contable o beneficio neto del año 2020 deberá ser al menos un 50% inferior al de 2019. "Las medidas que adoptamos ponen el foco, sobre todo, en las personas autónomas y las pequeñas empresas, que son las más afectadas o vulnerables a la pandemia. Reafirmamos nuestro compromiso para responder con todas nuestras capacidades a la crisis económica que está provocando la pandemia del COVID-19 ", ha subrayado Mendoza.

 

Parte COVID-19

Por último, y como cada semana, la portavoz ha actualizado el impacto que está teniendo la enfermedad COVID-19 en los recursos forales de políticas sociales. En el caso de los positivos, no hay casos entre las y los usuarios de las residencias de personas mayores desde el pasado 26 de febrero. En el caso del personal de estos recursos, hay 2 personas con diagnóstico positivo. Desde agosto, 562 personas trabajadoras han superado la enfermedad. Por otro lado, en la última semana no se han detectado positivos en los centros de día y en los recursos de atención a personas con discapacidad. En cambio, hay un nuevo positivo en la inclusión social y otros cuatro casos en atención a menores.

Por otro lado, en lo que respecta a las pruebas PCR, la Diputación, en colaboración con profesionales de la DYA, se han realizado ya 117.660 pruebas, de las cuales 2.317 se hicieron la semana pasada, entre residentes y personal. Por último, en cuanto a la vacunación, desde el pasado jueves la Diputación está administrando las segundas dosis de Pfizer a las y los usuarios de centros de día, discapacidad y salud mental. Previamente, se inocularon todas las primeras dosis entre todas las personas usuarias y trabajadoras (2.834 personas).

  

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