Servicio de la Diputación Foral de Gipuzkoa para promocionar y ayudar la creación y la formación de danza.
En Gipuzkoako Dantzagunea tienen cabida todo tipo de danzas, prestando servicios de apoyo a asociaciones, compañías y agentes que trabajan en la práctica de la danza: cesión de salas de danza, coordinación con la red de salas de Gipuzkoa, actividades de formación continuada, asesoramiento y difusión de convocatorias y subvenciones dirigidas a la promoción de la danza. Gipuzkoako Dantzagunea también colabora con otros centros de danza y centros de arte.
Gipuzkoako Dantzagunea se creó en 2009 de la mano de la Diputación Foral de Gipuzkoa y tuvo su primera sede en Arteleku. Desde 2014 está en el edificio Niessen de Errenteria. El Plan Vasco de la Cultura consideró como principal línea de trabajo del ámbito de la danza la implantación de una Casa de Danza, un Dantzagune, como centro de recursos y referente para la danza en cada provincia.
Mikel Sarriegi presentará "Gipuzkoako dantza-maisuen puntuak eta aldairak. Oinordetza ezkutua" el próximo 2 de octubre presentará en Donostia. En primer lugar, presentará las características principales de la herencia menos conocida de Iztueta, conservada por los maestros de danza de toda Gipuzkoa. A continuación, se centrará en el estilo de danza de la capital guipuzcoana y en cómo se contextualiza el sistema de danza que se ha conocido en Donostia a partir de la década de 1950.
El 24 de octubre, a las 19:00 en el Auditorio Niessen (Errenteria), se realizará el preestreno de la primera de las piezas que conformarán el próximo programa de DANTZAZ: “Kintsugi”, que reunirá las creaciones de cuatro coreografxs eurorregionales. Esta primera pieza ha sido coreografiada por Emilie Camacho, con música de Romain Serre. Inspirada en esta técnica japonesa que celebra la belleza de las cicatrices y la imperfección, Camacho investiga la fragilidad y la transformación con lxs bailarinas de Dantzaz, desde su convicción de que el arte en sí mismo tiene un poder reparador. Esta es la primera de cuatro creaciones, donde cada coreógrafx partirá de la idea común del “Kintsugi” y la memoria histórica, desarrollando su propia perspectiva artística.
El director y coreógrafo de la compañía Cielo Raso abre las puertas de su trabajo a quien se acerque. No hay que apuntarse y no es necesario acudir a todas las clases.