Sintomas y biología

Desgarra las hojas, hace caer brotes jóvenes y frutos, resultando los árboles que han sufrido sus efectos muy sensibles a plagas y enfermedades por lo que debe realizarse, dentro de las 48 horas posteriores a la granizada, un tratamiento que favorezca la cicatrización de las heridas.

Muchos fracasos en el cultivo frutal se deben al fenómeno llamado asfixia radicular, determinado por un bajo contenido de oxígeno en el suelo. Esto puede derivarse de un exceso de agua en la zona de raíces, elevado porcentaje de arcillas, plantación a demasiada profundidad y compactación del terreno debido al paso de máquinas o labores mal realizadas. Como medida preventiva se recomienda utilizar portainjertos adecuados (consultar Cuadro de patrones del manzano), drenar el terreno, efectuar labores profundas en el momento de la plantación, realizar enmiendas orgánicas y plantar a la profundidad adecuada, sin enterrar el punto de injerto.

Serían muchos y largos de describir los variados accidentes que pueden sufrir los manzanos: sequía, viento, polución atmosférica, fitotoxicidad por plaguicidas, etc. Como curiosidad, y con testimonio gráfico incluido, citamos los daños que pueden causar en el árbol los perdigones procedentes de escopetas mal empleadas por el cazador.

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