Energía geotérmica

La Energía Geotérmica se define como La energía almacenada en forma de calor por debajo de la superficie de la tierra. Este tipo de energía se obtiene mediante el aprovechamiento del calor que se genera en el interior de la tierra. Aunque las fronteras entre diferentes tipos son relativas, los yacimientos se clasifican según su temperatura:

  • De alta temperatura (150-400º C) – Uso final: Plantas eléctricas convencionales.
  • De temperaturas medias (70-150º C) – Uso final: Plantas eléctricas de ciclos binarios.
  • De baja temperatura (50-70º C) – Se obtiene de aguas termales, zonas volcánicas y almacenes sedimentarios profundos. Uso final: Balnearios, Acuicultura, Calor de distrito.
  • De muy baja temperatura (20-50º C) – Se obtiene del subsuelo (con o sin agua) y de aguas subterráneas. Uso final: Climatización.

Los sistemas geotérmicos son una forma rentable y eficaz de sacar provecho a la energía renovable que existe en la tierra. Con la tecnología actualmente disponible, esta energía renovable puede ser fácilmente captada y aprovechada para la producción de calor. Las principales ventajas de la energía geotérmica son:

  • A la hora de producir calor y respecto a un sistema convencional, una instalación geotérmica proporciona ahorros económicos de hasta un 70%
  • Son instalaciones robustas y sencillas. Funcionan en circuito cerrado, y carecen de mantenimiento.
  • Es una energía renovable y como tal, sujeta a subvención dentro de los distintos programas de apoyo de la Administración Pública.