Atrás Perspectiva de género en (nuestra) cultura, crónica de la sesión abierta

Perspectiva de género en (nuestra) cultura, crónica de la sesión abierta

K bulegoa dedicó la primera sesión abierta del año a abordar la “Perspectiva de género en (nuestra) cultura”. Más de 20 personas vinculadas al sector cultural participaron en la conversación, una experiencia que pone en valor el aprendizaje de saberes y haceres colectivos.

Perspectiva de género en (nuestra) cultura, crónica de la sesión abierta

K bulegoa dedicó la primera sesión abierta del año a abordar la “Perspectiva de género en (nuestra) cultura”. La reunión celebrada online el martes 1 de febrero se organizó en dos turnos, mañana en castellano y tarde en euskera. En total, más de 20 personas vinculadas al sector cultural participaron en la conversación, una experiencia que pone en valor el aprendizaje de saberes y haceres colectivos.

En la introducción se hizo hincapié en las aportaciones que la inclusión de la perspectiva de género, fruto de la lucha feminista de varias décadas, ha proporcionado a la sociedad. Más allá de reivindicar derechos para todas las personas, la lucha en favor de la equidad y la igualdad, y en contra de la discriminación, la perspectiva de género ha realizado una aportación de incalculable valor: un mayor conocimiento de nuestra historia, en todos los campos, cultura incluida. Nos ha proporcionado nuevas narrativas, ha rescatado del olvido y ha reivindicado el trabajo de mujeres (y no solo) que habían sido silenciadas.

Gracias a esta mirada amplia y reparadora —como explica Gerda Lerner—, construida a partir de una lucha infatigable, hemos conocido el trabajo de Alice Guy (la persona que rodó la primera película de cine de ficción, además de cientos de películas), de Sofonisba Anguissola (considerada la primera mujer pintora de éxito) o más recientemente de Vivien Maier. En nuestro entorno más próximo hemos disfrutado de la obra de Alice Neel en el Guggenheim y de una revisión de la colección del Museo San Telmo en Baginen Bagara, exposición comisariada por Haizea Barcenilla y Garazi Ansa, y próximamente Una voz para Erauso. Epílogo para un tiempo trans en Azkuna Zentroa, un proyecto de Paul B. Preciado y el colectivo Cabello / Carceller. Un nuevo paradigma que no pueden sortear ni pinacotecas tan emblemáticas como el Museo Nacional del Prado, que poco antes de cumplir su bicentenario dedicó por primera vez una exposición individual a una artista mujer, Clara Peeters, no sin antes asegurar de que la muestra se regía únicamente por criterios de calidad. Una presencia femenina reclamada (y denunciada) desde la década de los 80 por el colectivo Guerrilla Girls. Este cambio de paradigma lo explicita Angela Davis para la que “si bien la revolución fracasó, se produjeron algunos cambios que revolucionaron la forma de entender las relaciones humanas y el mundo que habitamos”.


La discusión comenzó con la presentación del marco normativo que incorpora el enfoque de género en varias disposiciones (leyes de igualdad, guías de organismos públicos) para después mostrar las diferentes formas de tratar la perspectiva en ayudas a la creación y la producción en el sector cultural.


Se mencionaron varias convocatorias como Egile, Lanabesak, Susperka, Tokiko, Oreka, Olatuak, Mundura (Diputación Foral de Gipuzkoa), Artes Plásticas y Proyectos culturales (Diputación Foral de Bizkaia), Programas de exhibición y difusión cultural y festivales en (Diputación Foral de Álava), Festivales, conciertos, espectáculos de Artes Escénicas y Musicales (Gobierno de Navarra), Producción de cortometrajes realizados (Ministerio de Cultura de España) y Cooperation projects del programa europeo Europa Creativa, por citar solo algunas de ellas.


En todas ellas se encuentran artículos que mencionan el enfoque de género de diversas maneras. Por un lado, se valora la igualdad o perspectiva de género en los proyectos, los planes de igualdad de las organizaciones solicitantes, la formación al respecto de las personas implicadas en el programa o incluso se establece una cuota de proyectos dirigidos por mujeres (tras pasar un primer corte de valoración). Por otro lado, se excluyen los proyectos que discriminen por razón de sexo. Y por último, se establecen varios requisitos para garantizar la igualdad de hombres y mujeres, la utilización de lenguaje no sexista y, en determinados casos, la existencia de planes de igualdad y planes de prevención de violencia de género, tal y como marcan las leyes de igualdad. Por ejemplo, en Bizkaia se solicita un informe de evaluación previa del impacto en función del género que incluya indicadores de medición, mientras que en Europa se pone a disposición de las entidades solicitantes un completo Gender Mainstreaming Toolkit.


La mayoría de participantes valoran el esfuerzo por garantizar la igualdad de género y el acceso de las mujeres, pero se señala que sería necesario ir más allá y valorar de manera cuantitativa el contenido de los proyectos (más allá de quién lo crea, gestiona y participa en él). Además, la mayoría de los redactados parten de una concepción binaria del género, que no refleja la diversidad existente en la sociedad e incluso existen ayudas que solicitan una justificación de la asistencia segregada por géneros difícilmente de cumplimentar por mera suposición. Algunas personas reconocen que la inclusión de la perspectiva de género en las convocatorias influye en la concepción y la gestión de los proyectos, e incluso en ocasiones se adaptan y modifican aspectos de los mismos para conseguir una mayor puntuación. Otras reclaman una visión menos paternalista a la hora de diseñar las políticas públicas, un feedback por parte de la comisión de valoración, que permita mejorar aspectos de los proyectos (como la perspectiva de género), e incluso líneas de ayuda que incidan de manera sustancial en el enfoque de género pero promovidas por los Departamentos de Cultura, además de las convocadas por los Departamentos de Igualdad. También se abogó porque la valoración de los apartados de género tengan más peso en el cómputo global.


Al hilo de las ayudas se citaron varias convocatorias recientes, como la Beca internacional de investigación Juncal Ballestín (Artium), la Bienal de Mujeres en las Artes Visuales, el programa de mentoring para mujeres cineastas Noka (Tabakalera) o la beca de investigación Julia Iruretagoyena (Ayuntamiento de Irun). En ayudas no sectoriales como Azpitek (SPRI) se alude de manera integral a tres transiciones: tecnológico-digital, energético-climática, socio-sanitaria; es en esta última en la que incorporan dimensiones como sistemas de salud y riesgos pandémicos, envejecimiento saludable, migración, nuevos modelos de cuidados e igualdad de género.

A continuación, se abordaron buenas prácticas en forma de proyectos, guías y bibliografía. Se citaron, entre otras, el Diagnóstico de situación de la igualdad de género en el ámbito del teatro, la danza, el libro y la música desde la perspectiva de la creación y la industria en Euskadi (Gobierno Vasco), el libro blanco Patrimonio cultural y perspectiva de género, el completo autodiagnóstico MAV para la igualdad en museos y la monografía Ciudad feminista. La lucha por el espacio en un mundo diseñado por hombres (Leslie Kern, 2021). Además, se discutieron herramientas como el test de Bechdel, un método para evaluar la brecha de género en las películas en general y, por extensión, en las series u otras producciones artísticas, y buenas prácticas en el seno de las organizaciones como grupos de discusión de personas creadoras con el objetivo de cambiar la realidad o audiciones ciegas sin ver a la persona que está interpretando. También se reconocieron las dificultades por incorporar la perspectiva de género en el fondo de un archivo de millones de registros, para lo que se necesitan ingentes recursos.

También se discutió el concepto de sororidad, la solidaridad entre mujeres en un contexto de discriminación y violencia. ¿Puede servir para avanzar algunas etapas en el largo y sinuoso camino? ¿Puede servir para identificar puntos negros y poner el foco en ellos? Existen iniciativas sectoriales como Euskal Herriko Emakume Musikarien Topaketak 一cuya valiosa contribución se analizó de primera mano一, DINAGU Euskal Herriko emakume sortzaileen kolektiboa u organizaciones como la Bienal Mujeres Artes Visuales. Si bien no es la panacea, puede ser una vía a explorar e intensificar, existe una necesidad de reuniones no mixtas, para articular y tejer redes, tal vez de manera sectorial, para huir de los tradicionales roles de poder que a menudo distorsionan el debate y afectan a la libre expresión. Al hilo de los encuentros de mujeres músicas, se han identificado los dos momentos clave que afectan directamente a la brecha de género: el fin de los estudios de formación músical en las escuelas públicas y la maternidad. ¿Por qué no se ataja esa brecha si está identificada?

Por último se abordó la dimensión del lenguaje en la perspectiva de género, un tema recurrente y complejo. Cambiamos el lenguaje para afectar la realidad o esperamos a que cambie la realidad y que los cambios se reflejen indefectiblemente en el lenguaje. Hablemos claro: Retórica y uso del lenguaje en el feminismo (Teresa Maldonado Barahona, 2021) critica precisamente el carácter críptico de muchos mensajes y recuerda la máxima de bell hooks “El feminismo es para todo el mundo”. El problema de cómo comunicar con enfoque de género, de manera inclusiva y no sexista, y, sobre todo, de manera eficaz e inteligible sobrevuela de manera constante en la publicación de multitud de guías y monografías, recomendaciones, neologismos, perífrasis y resignificaciones de palabras.

La conclusión de ambas sesiones se podría resumir en una frase: Se ha avanzado mucho a pesar de una pesada herencia de siglos; sin embargo, falta un gran camino por recorrer y, reiteradamente, nos faltan herramientas y recursos (y a veces una mayor voluntad) para ir más allá y dibujar un futuro bien diferente, para que dentro de 20 años, el retrato sea más nítido que en la actualidad.

En el documento descargable se recoge la crónica completa que recoge las ideas y reflexiones que se compartieron en las sesiones, además de un listado de recursos sobre el tema.