El proceso productivo

El proceso productivo de la elaboración de una cesta es marcadamente artesanal. Basta señalar que requiriendo una standard del orden de 18 horas de trabajo del artesano (una cada dos días) únicamente unos diez minutos se llevan a cabo con ayuda de una máquina.

Con carácter previo el inicio del montaje es necesario llevar a cabo varias operaciones. La primera es la fabricación del taco partiendo de madera de castaño o fresno para pasar a trabajar el aro para dejarlo al grosor y curvatura adecuadas para cada pelotari siguiendo con la preparación de las 13 cestillas necesarias para cada cesta, usándose para este trabajo la cepilladora a la que anteriormente nos hemos referido.

La siguiente tarea es igual que la anterior salvo que se aplica a las costillas a las que también se le da la curvatura deseada. Asimismo debe elaborarse la lengüeta y prepararse la tela y el guante fabricado a la medida del cliente donde el pelotari apoya e introduce la mano.

En esta actividad es frecuente que el cliente, la mayoría de las veces un pelotari, desea se le construya una cesta igual a la que viene utilizando y con la que "está a gusto". En estos casos y mediante un dispositivo que contiene un lápiz se marca su perfil exterior que va a servir de guía.

El montaje de la xistera se inicia colocando el taco en la parte trasera del aro para lo que su extremo se introducen en dos agujeros debiendo lograrse que queden muy ajustados. Se continua colocando 8 y hasta 10 alambres según modelo sobre el aro lo que determina la curvatura y fondo de la cesta que vamos a elaborar. A continuación se procede a colocar la costilla central, la única derecha para proceder a colocar seis costillas a cada lado de la central para hacer posible su curvatura. La parte que excede de la futura xistera, se humedece durante dos o tres horas doblándose sobre sí misma lo que refuerza la punta, por donde al usarse la cesta van a salir todas las pelotas.

Maestro artesanoEl maestro artesano en su taller.(Fotografía C.U.).

Las tres costillas centrales, donde recibirá el mayor impacto de las pelotas, se forran por su parte interior con una cinta autoadhesiva de nylon.

La siguiente operación el tejido de la cesta con mimbre que debe estar humedecido para que no se rompa y sea más fácil la elaboración es el trabajo más repetitivo habitualmente llevado acabo por mujeres requiriendo unas once o doce horas por cesta. Se inicia desde la punta hacia la punta superior hasta aproximadamente la mitad de la txistera para hacer la segunda parte en sentido contrario es decir desde el taco. Los alambres se van quitando gradualmente.

A continuación se coloca la tela donde el pelotari apoya la mano y sobre la misma se cose la lengüeta para pasar a colocar el guante de cuero donde introduce su mano. Finalmente se procede a reforzar la punta mediante su cosido con hilo negro.

Es frecuente que los pelotaris hagan marcar su nombre en una cara del taco.