Tallistas de vidrio

Una de las técnicas más utilizadas en la ornamentación de objetos fabricados con vidrio es el tallado, es decir, las operaciones para hacer variar su exterior, lo que habitualmente es un trabajo de notable complejidad, no solo por su contenido artístico, sino por sus características especiales, como fragilidad, lo que a pesar de su dureza, no permite someterlo a esfuerzos de cierta importancia. Todo ello obliga a que el trabajo deba realizarse lentamente, arrancando pequeñas cantidades de material de las partes que se necesitan rebajar. La decoración posterior, en muchos casos con llamativos colores, obliga a superar dificultades adicionales.

La talla y en su caso decoración, de objetos fabricados con vidrio, al igual que otros oficios, es una actividad en gran medida vocacional, sobre todo en el caso de los artesanos que trabajan en pequeños talleres. Un veterano en este oficio nos decía “tiene que gustarte pues acaba, en muchos casos, convirtiéndose en una manera de vivir”.

Todo ello explica, junto a la escasa tradición en esta especialidad en el País Vasco, que sea muy reducido entre nosotros el número de artífices dedicados a este trabajo.

Además esta profesión exige notables capacidades artísticas, pues de la creatividad de cada artesano, depende, en buena media, el aprecio que va a merecer su obra. Asimismo es necesario constancia en el trabajo y buenas dosis de paciencia, así como excelente pulso y una larga práctica que permite adquirir la necesaria experiencia.