La importancia de la explotación

Esta explotación tuvo importancia a juzgar por la cantidad de residuos acumulados en sus proximidades, verdaderos montículos y sobre todo por la gran cavidad cuya bocamina, tiene un frente de unos treinta metros, y más de veinticinco de alta con galerías de más de trescientos metros que han quedado al extraerse el yeso.

En 1966 según los datos oficiales la producción llegó a 6.489 toneladas “de yeso blanco y negro, y tres años más tarde a 12.000”.

Según las autoras de la repetidamente citada obra “Arqueología industrial de Alava”  su importancia fue notable pues con la ampliación de un tercer horno llegaron a facturar hasta 15.000 sacos de 40 kg., con destino a los mercados de Vitoria-Gasteiz, Bilbao y Miranda de Ebro.

Bocamina de PiquillosBocamina de Piquillos. (Isidro Sáenz de Urturri).