ENTRE EL OFICIO Y  EL TRABAJO TRADICIONAL

La Real Academia de la Lengua Española define el oficio “como la ocupación habitual”. En consecuencia la actividad que tradicionalmente han llevado a cabo las mujeres y , en mucho menor medida los hombres, de preparación de vestidos, sobre todo para los bebes, de manera totalmente manual incluso antes de su nacimiento, no puede considerarse como un oficio tradicional. La materia prima básicamente ha sido la lana.

Desde no hace relativamente mucho tiempo, la costumbre de preparar ropa para los bebes, acabó siendo tradicional con una delicadeza y estilo muy especiales. Con el transcurso de los años algunas mujeres han confeccionado chaquetas, mantas, vestidos, faldas, faldones, entre otras prendas, para venderlas en localidades próximas, llegando a constituir un ingreso de relativa importancia, lo que le convierte en un oficio.

El caso eibarrés es muy significativo como casi todo lo que afecta al trabajo. La Lanería Astigarraga se fundó en 1946 por los hermanos Justina y Rafael Astigarraga.

Además de las lanas, se vendían telas de todas clases: para mecánicos, vestidos, pantalones, sábanas, entre otros. También cosían prendas.

En el año 1991 tras la jubilación de los anteriores, al frente del comercio quedaron Gemma Gorosabel Astigarraga, Marisol y Auntxi quienes siguieron con la venta de los mismos productos, aunque, evidentemente, renovados.

Tras la jubilación de éstas, en 2012 Maite Castillo Barrenetxea, incorporando como profesora a Contxi Solás y dependienta a María Eugenia Sarasua, tomó las riendas y amplió el negocio impartiendo clases de punto, punto de cruz y ganchillo para la confección de toda clase de prendas: jerseís, chaquetas, fulares, gorros. A su vez retomó la confección de ropitas para bebes y niños de tanta tradición en la historia de Eibar.

Haciendo punto en la playa de Deba las eibarresas Ciriaca Ziorraga y Paz GuisasolaHaciendo punto en la playa de Deba las eibarresas Ciriaca Ziorraga (extremo izquierdo) y Paz Guisasola (extremo derecho). (Fotografía: colección de la familia AzkoagaGuisasola, tomada de la “Historia de las Mujeres de Eibar” de la que es autora Arantza Lasa)

(Fotografía: Yulen Zabaleta)(Fotografía: Yulen Zabaleta)

(Fotografía: Yulen Zabaleta)(Fotografía: Yulen Zabaleta)

El trabajo de la mujer eibarresa ha tenido una evolución muy positiva en los últimos años, aunque probablemente mejorable como puede comprobarse en el siguiente cuadro:

La lana sigue siendo el producto estrella en este comercio, con marcas de gran renombre. Algunas de ellas de venta en exclusividad. En la actualidad tienen clientes de todo el Bajo Deba.

El trabajo de la mujer eibarresa ha tenido una evolución muy positiva en los últimos años, aunque probablemente mejorable como puede comprobarse en el siguiente cuadro:

Tomado de la “Historia de las Mujeres de Eibar”, de la que es autora Arantza Lasa.Tomado de la “Historia de las Mujeres de Eibar”, de la que es autora Arantza Lasa.