La artesana

Carmen Pérez Martín, nacida en Zamora en 1.962, en su niñez con sus padres, que lo hicieron por motivos laborales, se desplazó a Durango (Bizkaia). Tras los estudios básicos cursó los de Formación Profesional en la rama de Delineación Industrial. Su afición al dibujo y la pintura le llevó a la Escuela de Arte de Deba (Gipuzkoa), donde aprendió cerámica, en el trienio 1.983/1.986. En la enseñanza optativa eligió en cada curso el grabado calcográfico, la talla de madera y piedra y la pintura. Al terminar sus estudios, comenzó a impartir clases de cerámica en las casas de cultura de Zaldibar (Bizkaia) y Durango, actividad que mantiene en esta última localidad.

Mediados los años ochenta del siglo XX su espíritu creativo le llevó a una cierta especialización en la elaboración de esculturas de cerámica. La reducida demanda de nuestros mercados más próximos le ha llevado a compaginar esta actividad con la de transformación del barro preparado (gres) en objetos de uso cotidiano. Al menos puede decirse que se han creado con esta finalidad, aunque con frecuencia son utilizados con fines decorativos.

Carmen PerezLa artesana Carmen Pérez frente al caserío Larra (Mañaria, Bizkaia) donde tiene su taller de cerámica.