Los últimos pastores trashumantes

En nuestro país, en el pasado, ha sido práctica habitual la trashumancia en busca de pasto, sobre todo en ganado lanar, desde zonas del interior hasta la costa y aunque todavía se mantiene en algunos casos, puede decirse que ha perdido la notable importancia que tuvo hasta lósanos ochenta.

José Jaureguialzo Lizarralde, natural de Zumarraga y residente en Olazagutia (Navarra) y su esposa Carmen Iribar Osa, del caserío Olabarri de Arrona-Goikoa. son un buen ejemplo de pastores que a finales de cada año con su rebaño de ovejas "latxas" (mutur gorria), y en algún caso cabras, hacían a pie el trayecto desde la sierra de Urbasa hasta Itziar para retornar entre finales de Marzo y mediados de Abril.

Asimismo José Esnaola Otegui de llarduia (Alaba), también llegaba a Itziar y Deba con su rebaño de "latxas", procedente de la sierra de Alzania, en los límites entre Alaba y Guipúzcoa, habiendo hecho su primer desplazamiento en 1.948 con 9 años de edad. Continuaba de esta forma de larga tradición trashumante de sus padres, quienes naturales de Idia-zabal y afincados en Ilarduia, se desplazaban a Eibar y Deba y de sus abuelos que, desde la primera población citada, bajaban en invierno con su rebaño a Arrona.

Aunque los trayectos que los trashumantes han seguido han cambiado a lo largo del tiempo, los últimos pastores, hasta hace dos décadas, han utilizado fundamentalmente las carreteras asfaltadas, con crecientes dificultades derivadas del aumento del tráfico de automóviles y camiones.

Traslado de un rebaño de ovejas por carreteraTraslado de un rebaño de ovejas por carretera. (Foto Antxón Aguirre).