Vidrieras de cemento

La aparición de nuevos materiales en el siglo XX, hizo posible una alternativa al soporte de plomo de las vidrieras, siendo la más utilizada el hormigón armado, a cuya difusión contribuyó el que no se necesitaran nuevos y complejos procedimientos.

El proceso inicial de la vidriera de cemento es similar a la del soporte de plomo, salvo que el artesano debe tener en cuenta que la distancia entre los vidrios debe llegar como mínimo a un centímetro. Además el cartón también se utiliza para obtener el armazón de la vidriera, que se conoce con el nombre de reja.

Para su construcción se parte de un marco metálico, dentro del cual se va a construir la vidriera. Puesto sobre un cartón, con el dibujo a tamaño real y frecuentemente en el suelo del local se van colocando en su interior varillas curvadas de material inoxidable de 4 a 5 mm. de diámetro, cuya forma coincide con las líneas de junta de las distintas piezas de vidrio. De esta forma se obtiene una especie de esqueleto metálico, que como hemos señalado anteriormente se conoce con el nombre de reja y que se suelda al marco exterior.

Los vidrios que se utilizan en este tipo de vidrieras tienen un grosor de dos centímetros, y reciben el nombre de dallas. Se recortan utilizando las plantillas, de la misma manera que para las vidrieras de plomo.

El maestro vidriero, coloca estas dallas en el lugar correspondiente, entre las varillas de la armadura, pegándolas al fondo para evitar que se muevan al verter el cemento y teniendo cuidado de que no toquen las varillas de la reja.

Una vez colocados los vidrios, es el momento de ir rellenando los espacios restantes con el cemento, utilizando para ello un recipiente pequeño que permita controlar mejor las cantidades que se vierten. Hay que asegurarse de que el cemento penetra por todas las rendijas posibles y de que se elimina todo el aire de la masa, cubriendo toda la superficie de la vidriera e incluso tapando las dallas, para conseguir un armazón perfecto y que los vidrios queden perfectamente ensamblados.

Cuando el cemento empieza a fraguar, lo cual depende de la temperatura ambiente y del tipo de masa empleado, se quita la capa superior, limpiando bien los vidrios del cemento sobrante,  quedando así la obra ya terminada.

El vidriero va colocando los trozos de vidrio en su lugarMarcando la forma de las dallas sobre un trozo de vidrio. El vidriero da forma a los vidrios golpeándolos con un martillo. Los temas de los vidrieros se pintan a pincel sobre los vidrios.

El vidriero va colocando los trozos de vidrio en su lugarEl vidriero va colocando los trozos de vidrio en su lugar, sobre el dibujo de la obra. Finalmente se rellenan los huecos entre las dallas con una masa de cemento utilizando una paleta.